EXPEDICIÓN BOTÁNICA A NUEVA GRANADA POR JOSÉ CELESTINO MUTIS


José Celestino Mutis fue un botánico, matemático, sacerdote y expedicionario español que ha pasado a la historia de la Humanidad por descubrir una riqueza natural americana nunca antes investigada, desde cargamentos de quina a una extraordinaria representación iconográfica de la flora y la fauna del Virreinato de Nueva Granada.

Su expedición botánica ilustrada también se encargó de radiar las nuevas teorías científicas de Linné y Newton sobre la América española.

expedición botánica de José Celestino Mutis
EXPEDICIÓN BOTÁNICA A NUEVA GRANADA POR JOSÉ CELESTINO MUTIS

José Celestino Bruno Mutis y Bosio nació en Cádiz, el 6 de abril de 1732. Esta era una ciudad en pleno auge comercial con América, que estaba desarrollando el estudio de las ciencias y el movimiento de la Ilustración.

En la década de 1750, Mutis iniciaba estudios de medicina y cirugía en el vanguardista Colegio de Cirugía de Cádiz, fundado por Pedro Virgili, carrera que continuó en la Universidad de Sevilla.

Tras concluir su etapa de formación, trabajó durante cuatro años en el Hospital de Cádiz. Sus primeras etapas profesionales se desarrollaron bajo la tutoría de algunos de los más eminentes científicos del momento.

Durante tres años se interesó por la física, la química, la fisiología, la patología y la historia natural, trabajando como suplente de la cátedra de anatomía del Hospital General de Madrid. En esta ciudad recibió la influencia de la botánica linneana impartida por Miguel Barnades y participó en algunas tertulias ilustradas, entre ellas la de la Sociedad Médica de la Real Hermandad de Madrid. Perfeccionó sus conocimientos botánicos en el Jardín del Soto de Migas Calientes y en el Hospital Real de la Marina de Cádiz.

retrato dibujo José Celestino Mutis Virreinato Nueva Granada
RETRATOS DE JOSÉ CELESTINO MUTIS

En septiembre de 1760, Mutis zarpó desde Cádiz con destino a Cartagena de Indias en la comitiva que acompañaba al recién nombrado virrey de Nueva Granada, Pedro Messía de la Zerda, alcanzando Santa Fe de Bogotá, al año siguiente. El territorio virreinal englobaba las actuales Colombia, Ecuador, Panamá, Venezuela, norte del Perú y Brasil, y oeste de Guyana.

A pesar de la dureza del clima tropical, las continuas lluvias, la agresividad de los mosquitos y su limitada salud, se dedicó a la actividad médica. Durante sus primeros meses, quedó cautivado por la agreste y exuberante naturaleza tropical, lo que estimularía su estudio por la botánica americana. Desde entonces, Mutis se dedicó a observar y describir el medio natural: desde la medicina popular a los venenos animales, desde las propiedades medicinales de las plantas a la utilización de las aguas, desde la explotación minera a las lenguas vernáculas. Mientras tanto, ejercía la profesión médica en la sede virreinal y una labor educacional como catedrático de matemáticas en el Colegio del Rosario.

En 1763 y 1764, Mutis propuso a la Corte de España el apoyo y la subvención para la realización de una expedición botánica por el Virreinato de Nueva Granada con el objetivo de estudiar la flora y fauna americanas al más estilo de las expediciones patrióticas e ilustradas de su época. Su proyecto consistía en elaborar una completa historia natural, explorar la población indígena y la naturaleza, y mejorar la economía del virreinato.

Ante la negativa burocrática, continuó sus investigaciones científicas y su cátedra, iniciándose a la explotación de las minas de plata de La Montuosa, en la provincia de Nueva Pamplona. Durante este período tuvo notable importancia el descubrimiento de quinos en varios lugares.

Virreinato Nueva Granada siglo XVIII
VIRREINATO DE NUEVA GRANADA

Después de veinte años, a petición del virrey y arzobispo Antonio Caballero y Góngora,
envió un actualizado tercer proyecto científico a la Corte de Carlos III. Este rey ilustrado, que había estudiado botánica además de otras ciencias, técnicas y artes, aceptó la propuesta en 1783.


La Real Expedición Botánica al Nuevo Reino de Granada se inició bajo su mando ese mismo año y prolongó unos treinta años más. Fue englobada en el marco científico e ilustrado en el que se fomentaron las expediciones de su época y que se denominó como el "redescubrimiento de América".

Aunque durante veinte años de vida en el territorio americano había reunido una valiosísima información científica, hasta el momento Mutis se había ocupado de la investigación botánica como actividad secundaria. En adelante, la observación y el estudio del medio natural constituyó su ocupación principal, siendo nombrado primer astrónomo y botánico de la Real Expedición.

Cubrió unos 8.000 kilómetros cuadrados, utilizando como eje el río Magdalena: Santafé y sus alrededores, la laguna de Pedro Palo, la Mesa de Juan Díaz, Guaduas, Honda y los alrededores de Mariquita, donde se establecería la base científica hasta 1790.

Dibujos Nuevo Reino de Granada Celestino Mutis
DIBUJOS FLORALES DE LA EXPEDICIÓN BOTÁNICA

El proyecto expedicionario permitía el adiestramiento de un grupo de naturalistas, formados por Mutis, para colaborar en sus trabajos de campo. Por esta razón, en Bogotá se abrió una Casa Botánica donde se formaron numerosos licenciados de pluma y herbolarios que estudiaron la historia natural y que realizaron láminas de excepcional calidad. Entre los dibujantes destacaban Salvador Rizo y Francisco Javier Mutisque fue calificado por Humboldt como el mejor ilustrador botánico del mundo. Años más tarde, el médico y botánico bogotano José Jerónimo Triana contribuyó decisivamente a la determinación de las especies. También fue relevante su herbario y su biblioteca.

Su obsesión por pintar plantas desde su entorno natural, el respeto por el sistema linneano y la reproducción con colores naturales le permitió realizar extraordinarias colecciones de dibujos de la flora colombiana y encontrar algunos pies de quinos.

Entre sus colaboradores más notables, que extendieron la cobertura geográfica a estudiar, estaban sus sobrinos José y Sinforoso Mutis, este último exploró el norte del virreinato y la isla de Cuba, recogiendo materiales y participando en el negocio de la quina; el científico naturalista Francisco José Caldas, que fue responsable de la observación astronómica, consiguiendo además un extensísimo herbario de las tierras de Ecuador; fray Diego García, que reunió un amplio muestrario de fauna y geología desde el Alto Valle del Magdalena, entre La Palma y Timaná, hasta la zona de los Andaquíes; Eloy Valenzuela, subdirector de la expedición, que efectuó colecciones en Santander y, más tarde, en Bucaramanga; el botánico Francisco Antonio Zea, quien llegó a ser director del Real Jardín Botánico de Madrid; y Jorge Tadeo Lozano, que  fue responsable de los trabajos zoológicos. Sus trabajos botánicos fueron la fuente de la Historia natural del Nuevo Reino de Granada.

Dibujos plantas Expedición Botánica Mutis
DIBUJOS FLORALES DE LA EXPEDICIÓN BOTÁNICA

Preocupado por la utilidad y el provecho que podía beneficiar a la humanidad 
de estos estudios, se centró en ciertas especies vegetales como el "té de Bogotá", la canela americana y, muy especialmente, en la quina.

La quina era extraída de la corteza de los quinos, árboles de la familia de las rubiáceas, cuyas propiedades febrífugas eran utilizadas por los indígenas. En Europa, ya se conocía sus propiedades curativas de este llamado "polvo de los jesuitas" desde que precisamente un jesuita, Bernabé Cobo, descubriese su uso como medicamento en 1638. La quina se había convertido en un remedio eficaz contra las fiebres, como el paludismo o la malaria.

Durante su tiempo, otros naturalistas se dedicaron al estudio de esta planta: el naturalista francés La Condamine realizó investigaciones sobre la curativa corteza en la región de Loja (Quito); el médico español Pedro Virgili, maestro y protector de Mutis, fue el primer promotor de la creación de un monopolio de la quina peruana a instancias de Antonio Ulloa.

En 1772, descubrió una especie de quino en los bosques de Cundinamarca, resultando un hallazgo relevante ya que hasta la fecha se creía que el quino sólo crecía en las cercanías del Ecuador. Más tarde, descubrió otras especies de cinchona, el tipo de quina más habitual, teniendo propiedades medicinales algunas de ellas.

Sobre esta planta medicinal, sus especies, su forma de cultivo, recolección y protección, sus propiedades, y utilización en las enfermedades se volcaron algunos de sus más importantes trabajos.

Dibujos Botánica Nuevo Granada Celestino Mutis
DIBUJOS FLORALES DE LA EXPEDICIÓN BOTÁNICA

A principios del siglo XIX, Mutis consiguió implantar en el virreinato su plan de desarrollo científico desde la base fundacional de instituciones a imagen y semejanza a las europeos: fundó la Sociedad Patriótica del Nuevo Reino de Granada, también conocida como Sociedad Económica de Amigos del País de Bogotá, inauguró el Observatorio Astronómico de Santa Fe de Bogotá, y elaboró un plan de estudios de medicina, vinculados al Colegio
Mayor de Nuestra Señora del Rosario.

La Sociedad Económica de Bogotá promovió novedades en los sistemas educativos, económicos y sociales que mejoraron la vida en el virreinato.

Esta expedición resultó decisiva para el desarrollo de la cultura y la investigación en el territorio de la actual República de Colombia, ya que no sólo estudió la flora, la fauna y la minería, sino además las lenguas indígenas de su entorno. Es destacable la elaboración de una serie de vocabularios elementales constituidos por 100 palabras de cada idioma indígena por encargo del rey Carlos III. El Borbón respondía a la demanda de la zarina Catalina la Grande que le había solicitado vocabularios de las lenguas habladas en todos sus reinos, para hacer un monumental Diccionario de todas las lenguas del mundoLa defensa de los derechos de los indígenas y de sus culturas por parte de la Monarquía española fue un hecho verificable tanto Mutis como  otros hombres y mujeres de su tiempo.

Celestino Mutis Observatorio astronómico Bogotá
JOSÉ CELESTINO MUTIS Y OBSERVATORIO DE BOGOTÁ

José Celestino Mutis impulsó el desarrollo de otras ciencias especialmente las relacionadas con procesos industriales, como la minería de la plata y la destilación del ron. Contribuyó a mejorar el rendimiento de la Universidad de Bogotá en la que introdujo la ciencia moderna, siendo muy notable su influencia sobre las matemáticas, la física, la medicina y la historia natural.

Se preocupó por el progreso de la sanidad en campos como la enseñanza de la medicina, la mejora de la profesión, las instituciones y los tratamientos adecuados. Las líneas de reforma eran novedosas: la medicina debía basarse en las ciencias experimentales y ser enseñada por medio de modernos libros. Era necesario cultivar la observación en las prácticas médicas, así como las autopsias, los estudios de enfermos y la atención a estos junto a sus lechos. La medicina se abría a los idiomas modernos, a las ciencias y a las prácticas recientes. Entre sus colaboradores y discípulos destacó Miguel Isla.

La apertura hacia la ciencia astronómica permitió la fijación de los puntos geográficos y el estudio de los cielos. Francisco José de Caldas, su principal figura, fue quien estableció las coordenadas de Bogotá y comenzó una importante labor cartográfica necesaria para la geografía, la economía, la política y la defensa de las costas frente a los ingleses.

Durante su carrera científica, Mutis tuvo que defenderse de las acusaciones de la Iglesia, por ejemplo, en 1762, cuando al inaugurar la cátedra de matemáticas del Colegio del Rosario de Bogotá, en el Virreinato de Nueva Granada, expuso los principios del sistema copernicano, de la ciencia moderna y del método experimental.

Fue el primer defensor de los principios de Copérnico, así como de la física y la matemática modernas, inspiradas en Isaac Newton, y de la "filosofía natural", lo cual le ocasionó, en 1774, el enfrentamiento a los sectores más conservadores de la Iglesia del virreinato, en una nueva controversia.

Esculturas botánico Mutis Bogotá Cádiz
ESCULTURAS DE JOSÉ CELESTINO MUTIS

Con el tiempo, Mutis fue adquiriendo un gran renombre en los círculos científicos europeos. Mantuvo
constante correspondencia con los principales científicos europeos y españoles, entre los que destacaba Carlos Linneo, "padre de la taxonomía".

La relación entre Linneo y Mutis se inició a través de los discípulos del gran naturalista sueco, Clas Alströmer y Frederic Logié, a quienes Mutis conoció en el puerto de Cádiz, cuando se disponía a partir a Nueva Granada. Linneo mostró interés en el estudio de la quina, por lo que Mutis le remitió ejemplares de una especie diferente a la Conchona oficiales. Linneo hijo introdujo en su honor el género Mutisia, ampliando el significado que le dieron los alumnos de Mutis.

También compartió sus observaciones con Aimé Bonpland y con el prestigioso geógrafo y naturalista alemán Alexander von Humboldt, que le visitó durante su viaje expedicionario por América en 1801. Tal fue la admiración despertada por el alemán que le llamó "príncipe e ilustre patriarca de los botánicos".

También consiguió que Juan José Elhuyar fuese a Nueva Granada para mejorar la producción de la plata en el virreinato y, al igual que había hecho su hermano Fausto Elhuyar en Nueva España, planteó con Mutis posibles mejoras en la extracción y administración de este metal. Eran dos magníficos científicos con muy buena formación en química, minería y metalurgia. La Corona quería mejorar la extracción de la plata en los virreinatos, aumentando así las remesas a una Europa necesitada de metales nobles para la acuñación de monedas debido a los importantes cambios políticos, bélicos, sociales y económicos de la época.

geógrafo naturalista Alexander von Humboldt Mutis botánico
ALEXANDER VON HUMBOLDT

José Celestino Mutis murió en Bogotá, el 11 de septiembre de 1808. Sus restos reposan en la Universidad del Rosario en Bogotá como docente que fue de esta institución.

Su sobrino, Sinforoso Mutis Consuegra, hijo de su hermano Manuel, se hizo cargo de la Expedición Botánica con la colaboración de los oficiales de la Casa Botánica. Sinforoso completó el trabajo de su tío sobre la quina publicando, en 1809, un importante libro médico-botánico llamado Historia de los árboles de la Quina. Describió siete especies del género cinchona: lancifolia, cordifolia, oblongifolia, ovalifolia, longiflora, parviflora y flora; y comentaba asimismo sus propiedades medicinales.

El arcano de la quina. Obra póstuma del doctor don José Celestino Mutis, que contiene la parte médica de las cuatro especies de quinas oficiales, sus virtudes eminentes y su legítima preparación fue publicada en Madrid, en 1818, por el doctor Manuel Hernández de Gregorio. Se trataba del trabajo que Celestino Mutis entregó para su publicación en 1807, poco antes de morir.

Tras el estallido de los movimientos de emancipación de 1818, los materiales de la expedición (herbario, manuscritos y dibujos) se llevaron a España y actualmente se conservan en el Real Jardín Botánico de Madrid. Los más destacado son sus más de 6.000 dibujos botánicos de flora colombiana que forman parte del patrimonio nacional.

Mutis está considerado un padre fundador de la formación nacional de Colombia, por eso es significativo que el Jardín Botánico José Celestino Mutis de Bogotá fuese nombrado en su honor, al igual que el Parque Botánico José Celestino Mutis de Palos de la Frontera.

Billetes José Celestino Mutis
BILLETES DE JOSÉ CELESTINO MUTIS

ESCUELA DE TRADUCTORES DE TOLEDO


La Escuela de Traductores de Toledo consistió en una serie de iniciativas culturales desarrolladas desde su reconquista de esta ciudad en 1085, por Alfonso VI, hasta su máximo esplendor cultural en tiempos de Alfonso X el Sabio.

El objetivo fue trasladar del arábigo al latín y al castellano todos los textos sobre las disciplinas del conocimiento y del saber que los árabes habían aportado a la España musulmana, en especial las ciencias; conocimientos que permanecieron ignorados en la Europa cristiana medieval.

Escuela Traductores Toledo Alfonso castilla latín
ESCUELA DE TRADUCTORES DE TOLEDO

UNIVERSIDAD DE SALAMANCA


La Universidad de Salamanca es la más antigua de España y una de las cuatro de Europa abiertas actualmente, junto con las de Bolonia, Oxford y París (La Sorbona). El origen de esta universidad fue el Estudio General de Salamanca, inaugurado en 1218 por Alfonso X el Sabio. Fue el segundo Estudio General más antiguo de España tras el de Palencia, fundado en 1208.

Además, fue la primera institución educativa española y europea que obtuvo el título de Universidad, es decir, de validez universal de sus títulos, a través de la bula papal de Alejandro IV en el año 1255. En la actualidad es una universidad pública, y fue pontificia hasta 1852.

UNIVERSIDAD DE SALAMANCA

La Universidad de Salamanca tuvo su origen en la Escuela Catedralicia de Salamanca, fundada en 1130. El primer documento oficial fue expedido por el rey Alfonso IX de León, quien le concedió en 1 de enero de 1218 la categoría de Estudio General salmantino, "Studii salmantini". Esta titulación manifiesta la diversidad de las cátedras impartidas (Derecho Canónico, Civil, Medicina, Lógica, Gramática y Música), la validez de sus títulos, y su carácter público abierto a todos cuya pretensión era competir con el Estudio de Palencia, al que Alfonso VIII de Castilla había dado este título en 1208.

Bajo el reinado de Alfonso X el Sabio, rey de Castilla y León, el Estudio General se convirtió en Universidad, en su doble carácter de real y pontificia, el 8 de mayo de 1254. Además de los reyes, diversos papas favorecieron a la universidad: Alejandro IV confirmó la titularidad de Universidad, la primera de toda Europa, en 1255.

Según lo escrito en las Siete partidas de Alfonso X, esta institución fue concebida como "Estudio es ayuntamiento de maestros, e de escolares, que es fecho en algún lugar, con voluntad, e entendimiento de aprender los saberes", conforme al espíritu medieval. El rey asignó sus primeras ordenanzas, dotó sus primeras cátedras estables, como la de música, y creó el cargo de bibliotecario, siendo la primera universidad de Europa que toma este nombre y que contaba con biblioteca pública.

Funcionaba como una corporación autónoma, independiente de la ciudad y del cabildo catedralicio, participativa y celosa de sus privilegios, disponiendo de sus propias reglas y hasta de sus propias instituciones penales. El rector podía ser un estudiante elegido por los miembros de la corporación, si bien la concesión de los grados académicos correspondía a autoridades como el maestrescuela o el canciller. Las cátedras se asignaban por cooptación, mediante oposiciones públicas acompañadas a veces de asambleas tumultuarias.

En sus comienzos, las clases se impartían en el claustro de la Catedral Vieja, en casas alquiladas al cabildo y en la iglesia de San Benito, hasta que a principios del siglo XV empezaron a fundarse colegios. El primer edificio propiamente universitario fue el Colegio Mayor de San Bartolomé, fundado por el obispo Diego de Anaya Maldonado, en 1401.

El cardenal aragonés Pedro de Luna, gran protector de la institución, impulsó la compra de los primeros solares y la construcción del Hospital del Estudio (actual rectorado), las Escuelas Mayores y las Escuelas Menores. Además también se impartieron enseñanzas en los Colegios Mayores y Menores o en conventos de las órdenes religiosas.

MEDALLÓN DE LOS REYES CATÓLICOS EN LA FACHADA DE LAS ESCUELAS MAYORES

El edificio más emblemático de la Universidad es el de las Escuelas Mayores, que se comenzó a construir en 1411. La fachada, dedicada a los Reyes Católicos en 1534, es el elemento más conocido y está dividida en tres cuerpos. El primero contiene el medallón de los Reyes Católicos que empuñan el mismo cetro. En la parte inferior se puede leer "Fernandino - Elisabeta", y en la parte superior, en griego, "Los Reyes a la Academia, y ésta a los Reyes", donde aparecen el yugo de Fernando y las flechas de Isabel.

El segundo cuerpo contiene en el centro el escudo de Carlos V, rematado con un globo y una cruz sobre una espectacular corona; a la derecha el águila de San Juan y de los Reyes Católicos, a la izquierda el águila bicéfala del Imperio. En el tercer cuerpo hay una capillita donde se halla Papa Benedicto XIII que exhorta los clérigos.

El patio posee un doble claustro con columnas y arcos de medio punto, en la galería inferior, y columnas muy finas y arcos truncados mixtilíneos en la galería superior. En la planta baja están las antiguas aulas en las que impartían estudios generales, destacando las aulas de Salinas, Fray Luis de León y el Paraninfo.

La biblioteca cuenta con más de 40.000 volúmenes escritos entre los siglos XVI y XVIII, en todas las lenguas y materias, destacando las dedicadas a teología, letras y leyes. La biblioteca se extiende a un recinto anejo cubierto por una bóveda gótica estrellada, donde se guardan tres mil seiscientos manuscritos y cuatrocientos incunables con páginas de pergamino y vitela, escritos entre los siglos XI al XVI.

BIBLIOTECA DE LA UNIVERSIDAD DE SALAMANCA

Durante el Siglo de Oro en España existían tan sólo seis Colegios Mayores de los cuales cuatro pertenecían a la Universidad de Salamanca: el de San Bartolomé, el de Oviedo, el de Cuenca, y el de Santiago; a estos habría que sumar el de Santa Cruz en Valladolid y el de San Ildefonso en Alcalá de Henares. Salamanca contaba además con numerosos colegios menores y otros centros universitarios de diversa índole.

Es durante este periodo de máximo esplendor de la cultura española cuando la Universidad se convirtió en el escenario de relevantes acontecimientos para la historia de la humanidad. En el claustro de esta Universidad se discutió sobre la viabilidad del proyecto de Cristóbal Colón y las consecuencias que traían sus afirmaciones. Tras el descubrimiento de América, se discutió sobre el derecho de los indígenas a ser reconocidos con plenitud de derechos; la denominada polémica de indis fue algo revolucionario para la época.

Se analizaron los procesos económicos por primera vez, generándose el primer movimiento de estudios y análisis de la macro economía moderna, conocida como Escuela de Salamanca. Esta institución fomentó un corriente de pensamiento económico durante los siglos XVI y XVII, capaz de reconciliar la doctrina tomista (Santo Tomás) con el nuevo orden social y económico, y abordar los cambios de la Edad Moderna desde una nueva perspectiva.

Sus profesores fueron un grupo de escolásticos españoles, teólogos y juristas, seguidores de las corrientes moralistas e iusnaturalistas que efectuaron novedosas aportaciones en el estudio del hombre y su relación con la moral, la economía y la justicia. Sus miembros más brillantes fueron Luis de León, Francisco de VitoriaDomingo de SotoMartín de Azpilcueta, Tomás de Mercado, Luis de Molina, Bernardino de Sahagún, Domingo Báñez, Francisco Suárez, etc. 

Todos ellos formaron un importante foco humanista, renovaron la teología, sentaron las bases del Derecho moderno de gentes, del Derecho Internacional, precursora de los primeros Derechos Humanos, encabezados por Francisco de VitoriaY efectuaron los primeros estudios en etnografía y antropología social moderna, especialmente por Bernardino de Sahagún

Describieron, por primera vez, los efectos producidos por la masiva llegada de metales preciosos traídos desde el Nuevo Mundo a Europa, abordaron cuestiones referentes al dinero, valor y precio, y formularon las primeras teorías macroeconómicas como la teoría del valor-escasez de un producto, la teoría cuantitativa del dinero o la ley de la oferta y la demanda, generando conceptos como la inflación o el interés bancario. En este campo destacaron Martín de Azpilcueta o Tomás de Mercado, considerados como los fundadores de la ciencia económica.

También participaron activamente en el Concilio de Trento, cumbre del pensamiento católico español sobre la irrupción del protestantismo europeo.

Matemáticos de esta Escuela estudiaron la reforma del calendario, por encargo del papa Gregorio XIII, y propusieron la solución que se implantó posteriormente.

ESTATUA DE FRANCISCO DE VITORIA

Hacia 1580, llegaban a Salamanca 6.500 estudiantes nuevos cada año, de entre los que se nutría la administración de la Monarquía hispánica para hacer funcionar su Estado. También tuvo en esa época las que probablemente fueron las primeras alumnas universitarias del mundo: Beatriz Galindo fue famosa por sus conocimientos y consejera de la reina Isabel; y Lucía de Medrano fue la primera mujer profesora en impartir clases en una Universidad del mundo, durante el curso 1508-1509.

En el siglo XVII se produjo una decadencia, debida principalmente a que los Colegios Mayores pasaron a estar en manos de los hijos de la nobleza, olvidando su origen de enseñar a jóvenes valiosos pobres. Un título por Salamanca o haber sido Colegial, era llave para obtener cargos importantes en la Administración.

Durante el Siglo de Oro español, además de los brillantes miembros de la Escuela de Salamanca, asistieron a la Universidad distinguidos escritores como Fernando de Rojas, Luis de Góngora, Mateo Alemán, Calderón de la Barca; personalidades ilustres de la cultura como Antonio de Nebrija, Manuel de Larramendi, Manuel Fernández Álvarez, Pedro Sánchez Ciruelo, Antonio de Covarrubias, Diego de Covarrubias, Ambrosio de Morales, Abraham Zacuto, etc.

Antonio de Nebrija pasó a la Historia por redactar la primera gramática de una lengua vulgar, convirtiéndola en lengua culta, fue la Gramática de la Lengua castellana, que dedicó a su reina Isabel I la Católica durante su visita oficial a la ciudad universitaria.

CATEDRAL DE SALAMANCA

En el Siglo de las Luces, la Universidad de Salamanca constituyó uno de los principales difusores de la Ilustración española. En torno al profesor de filosofía moral y jurídica Ramón de Salas y Cortés y al ilustre poeta Meléndez Valdés se congregaron personalidades notables como el matemático y filósofo Miguel Martel, el bibliotecario de la universidad, traductor, sistematizador y difusor del pensamiento de Jeremy Benthan, Toribio Núñez Sessé, el matemático Juan Justo García, o los poetas y políticos Juan Nicasio Gallego y Manuel José Quintana.

Muchos de los estudiantes, profesores e intelectuales vinculados a este círculo ilustrado desempeñaron, como por ejemplo Diego Muñoz Torrero, un papel fundamental en la elaboración de la primera Constitución española en las Cortes de Cádiz de 1812, denominada La Pepa, el desarrollo del liberalismo y el pensamiento progresista en España y la introducción de las entonces incipientes ciencias sociales. No fueron ajenos a este renacer los prelados de Salamanca de ideas ilustradas, como Bertrán o Tavira, siendo este último catedrático de la Universidad.

El reinado de Fernando VII y la restauración del absolutismo, tras el breve trienio liberal de 1820 a 1823, condujo a la frustración de este renovador y prolongado movimiento intelectual.

Durante la Guerra de la Independencia española muchos de los Colegios salmantinos resultaron destruidos, ya que los franceses utilizaron la piedra de los edificios para construir defensas, y las bibliotecas fueron expoliadas de sus mejores fondos. Los libros se recuperaron entre el equipaje de José Bonaparte, tras la batalla de Vitoria en 1813, y una parte de los fondos fueron regalados por Fernando VII al general Wellington, como agradecimiento, y otra pasó a formar parte de la Biblioteca del Palacio Real. Estos últimos fueron recuperados para la Biblioteca de la Universidad en 1954.

En mayo de 1852, la Universidad perdió la condición de Pontificia mediante real orden, que suprimió las facultades eclesiásticas de la Universidad de Salamanca.

En 1953, la Universidad celebró el VII Centenario del edicto de Alfonso X que le dio el título de Universidad, la primera de Europa que lo ostentó oficialmente. Y en 1886, la Universidad de Salamanca, junto con la de Coimbra, recibió el Premio Príncipe de Asturias de cooperación internacional.


AYUNTAMIENTO DE SALAMANCA

TREN ARTICULADO LIGERO POR GOICOECHEA Y ORIOL


El TALGO es un tren de diseño español, articulado y ligero, además de seguro y veloz, muy revolucionario para la época. Fue proyectado internacionalmente en la década de 1940 con éxito, y está considerado como el primer tren moderno de la historia.

Su nombre proviene de las siglas de Tren Articulado Ligero Goicoechea Oriol, en atención a su ingeniero Alejandro Goicoechea y su promotor José Luis Oriol Uriqüen.

TALGO primer tren moderno
TREN ARTICULADO LIGERO POR GOICOECHEA Y ORIOL

Alejandro Goicoechea Omar nació en Elorrio, Vizcaya, en 1895. En su niñez había estudiado en el Colegio de los Jesuitas de Orduña.

Ingresó en la Escuela de Ingenieros del Ejército ubicada en Guadalajara, alcanzando los grados de teniente e ingeniero de Armamento y Construcción, siendo el número uno de su promoción, en 1918.

En 1920, escogió destino en el Regimiento Ferroviario de Madrid. Tras servir en Marruecos como capitán de Artillería, en 1921 pasó a la Compañía del Ferrocarril Bilbao-La Robla. Esta empresa estaba dedicada al transporte de mineral y en ella ocupó la jefatura de materiales de tracción hasta 1936. Durante ese tiempo aplicó nuevas técnicas de soldadura empleadas en Bélgica y Alemania para puentes y acorazados, con el fin de proveer a los trenes de su empresa de unos vagones más ligeros, rápidos y resistentes.

En 1926, se hizo un primer vagón, completamente soldado, sin remaches ni tornillos, que al año siguiente fue presentado al público en Bilbao, patentado en el Registro de la Propiedad Industrial y fabricado en serie por la empresa.

SELLOS DE CORREOS TREN TALGO

A principios de la década de 1930, Goicoechea se interesó por los trenes de viajeros para reducir el alto número de heridos en los accidentes a causa de las astillas de los vagones. Aplicando su procedimiento podría conseguirse un vehículo rápido, seguro y barato. Así, a partir de 1931, se embarcó en el proyecto de un tren de rodadura elevada, muy ligero, totalmente articulado y sin posibilidad de descarrilar gracias a que su bajo centro de gravedad permitía grandes velocidades sin apenas riesgo.


La Guerra Civil interrumpió su proyecto ya que, en febrero de 1937, Goicochea era incorporado al Ejército de la República española como capitán de ingenieros y encargado de las fortificaciones de Bilbao. En marzo de ese año, se pasó al bando franquista, al que proporcionó valiosa información, decisiva en la posterior caída de la ciudad como fueron los planos del "cinturón de hierro" de Bilbao, además de datos sobre municiones e industria armera vasca.

En 1938, asistió al Congreso de Ciencias de Santander, en donde presentó algunas de sus innovaciones. A partir de 1939, contó con el apoyo financiero del empresario bilbaíno José Luis de Oriol y Urigüen y del alto mando militar. Entonces, pudo recuperar su proyecto de ingeniería ferroviaria que estuvo desarrollando antes de la guerra. Uno de sus objetivos fue el aligeramiento del peso de los trenes.

TALGO Tren Articulado Ligero Goicoechea Oriol Uriqüen
ALEJANDRO GOICOECHEA Y JOSÉ LUIS ORIOL

El Tren Articulado Ligero Goicoechea Oriol apareció por primera vez en 1941, el año en que se crea en España el Instituto Nacional de Ingeniería y la Red Nacional de Ferrocarriles Españoles.

Está basado en coches o vagones cortos y más bajos que los tradicionales, que forman un sistema articulado de chasis colgados sobre bastidores triangulares isósceles que se utilizaban como soporte a ruedas independientes, que podían girar cada una con independencia de las otras. Su cobertura de aluminio ligero le confería menor peso 
y más seguridad, y un centro de gravedad más bajo que impedía su descarrilamiento. Este avance supuso la posibilidad de alcanzar mayores velocidades con gran confort interior, debido a la amplitud y su buen sistema de amortiguación adaptando la rodadura a las inflexiones de la vía. Para esto último, Goicoechea innovó un sistema de articulaciones singular formado por triángulos isósceles que servían de soporte a ruedas independientes, pudiendo cada una gira de forma autónoma con respecto a las demás.

Además, sus diseños eran realmente atractivos y modernos, buscando siempre la aerodinámica y el estilo. 

Este sistema revolucionó el transporte ferroviario. A este le seguiría otros grandes proyectos posteriores: el tren turbo norteamericano (1962), el Tokaido y Sanyo japonés (1964), el A.P.T. británico (1964), y el E.T.G. francés (1967). Todos ellos basaban sus avances en el uso de materiales ligeros y en la mayor propulsión. Sin embargo, el guiado de ejes y el logro de ruedas independientes, unido a la aplicación de técnicas aeronáuticas para la estructura, hacían del TALGO un tren especial e innovador.

Vagón tren TALGO
TREN TALGO I

El primer modelo fue el orgánico y disruptivo Talgo I, también llamado Tren Oruga. Se trataba de un prototipo de convoy con estructura de aluminio y compuesto por locomotora y sólo un chasis, fue puesto en práctica en la línea Madrid-Leganés, en 1941. Al año siguiente, este modelo alcanzó los 115 km/h entre Madrid y Guadalajara.

Pese a lo satisfactorio de las pruebas, las autoridades españolas no pudieron prestar el apoyo necesario debido a la difícil coyuntura nacional e internacional. Sin embargo, e
l 28 de octubre de 1942, Goicoechea constituyó junto a su socio Oriol la empresa Patentes TALGO S.A., abreviatura de Tren Articulado Ligero Goicoechea Oriol, creando la primera sociedad industrial española que desarrollaría tecnología propia en la fabricación de trenes remolcados. Fue toda un aventura y osadía el hecho de querer invertir e innovar en este sector, en un momento tan desfavorable por la destrucción que la guerra civil había efectuado en el sistema ferroviario español.


El Talgo II, presentando en 1945, era un modelo más comercial. Introducía introducía importantes novedades de comodidad en relación con los trenes convencionales europeos, como el asiento reclinable, el aire acondicionado, o una pequeña cafetería a bordo.

Fue producido por primera vez en 1949, en Nueva York, por la empresa American Car & Foundry. Era imposible su fabricación en una Europa que estaba reponiéndose de las desastrosas consecuencias de la II Guerra Mundial.

En marzo de 1950, RENFE puso en funcionamiento en la línea Madrid-Valladolid con un Talgo II. El mismo día de su inauguración, se batió el record de velocidad media ferroviaria de España. Según la prensa nacional, este acontecimiento significaba "el más alto exponente de la tecnología española". En 1964, los Talgo II unieron por primera vez Madrid con Barcelona.

TREN TANGO II

Desde la década de los 1960, estos trenes iniciaron su exitosa carrera por las vías españolas e internacionales, recibiendo continuos perfeccionamientos. Sus trenes podían alcanzar velocidades superiores a los 200 km/h, disponían de marcha atrás o marcha en dos sentidos.

Una de las innovaciones fue el sistema de rodadura desplazable que permitía acoplar los distintos anchos de vías, pudiendo conectar las vías de España con las de Francia, de menor amplitud, común en toda Europa. Otro fue la introducción de importantes novedades de confort en relación con los trenes convencionales europeos, como el asiento reclinable, el aire acondicionado o cafeterías tipo avión.

Entre los proyectos de investigación que emprendió la empresa Patentes Talgo estuvo un plan de enlace España-Marruecos, a través del estrecho de Gibraltar; un tren reacción Jet-C; y varios trenes ultraligeros.

Durante bastantes años fueron los dominadores del mercado mundial. Pero fue Estados Unidos el primer país en adquirir la tecnología Talgo, que se convirtió en el primer tren europeo establecido en Norteamérica, llegando a copar dicho mercado desde mediados de los 60 hasta los 80, de hecho gran parte de los trenes de los EEUU son Talgo todavía.

A principios de la década de 1970, Goicochea proyectó un vanguardista Tren Vertebrado que no tuvo repercusión comercial. En 1972 batía el record español de velocidad al alcanzar los 222 km/h.

En los años 80, se lanzó el famoso Talgo Pendular, adoptando nuevas innovaciones de gran comodidad, ligereza y rapidez, eran más confortables capaces de incrementar la velocidad en las curvas. Varios de estos avances han sido incorporados a los actuales trenes de alta velocidad. Tanto fue su éxito que la empresa Talgo dio comienzo a una nueva etapa de expansión internacional, equipando trayectos en Alemania, Estados Unidos, países escandinavos y del este europeo.

Diagrama fuerzas curva tren convencional pendular
DIAGRAMA DE FUERZAS DE TRENES EN CURVA

Retirado como teniente coronel, Goicoechea continuó buscando soluciones al enlace del estrecho de Gibraltar y desarrollando un tren vertebrado con el que pudiese resolver el problema del creciente tráfico urbano. Sin embargo, este no era el único ferrocarril especial de nueva concepción, ya que otros sistemas europeos presentaban características similares como fueron los casos del Alweg alemán, el Aerotrain francés, o el Hovertrain británico, que no tenían movimiento pendulares y el centro de gravedad coincidían con el plano sustentado.

Alejandro Goicoechea Omar falleció en Madrid, en 1984. Entonces, uno de los sucesores de la compañía, Lucas Oriol, expresó con un ánimo de agradecimiento la aportación de sus innovaciones en del transporte ferrovial:
"Su novedoso sistema estaba basado en tres aportaciones: bajo peso, bajo centro de gravedad y sistema de guiado sobre la vía. De estas tres características, el sistema de guiado ha sido la que más evoluciones ha experimentado, hasta llegar al Talgo Pendular que hemos desarrollado y ha entrado en servicio en 1980."
En la década de 1990, RENFE eligió al Talgo 350 para a cubrir la línea del Tren de Alta Velocidad Española entre Madrid y Sevilla, con un récord de velocidad de 363 km/h. Fue denominado modelo Pato por la forma de pico de su cabecera.

La empresa Patentes Talgo se fundó con el objetivo de innovación constante y del perfeccionamiento de sus trenes, una investigación y desarrollo en transportes ferroviarios que se ha ido perfeccionando con el paso del tiempo y con Goicoechea a la cabeza.

Toda esta brillante trayectoria fue compensada con el Premio Nacional de Diseño en el 2003.

TREN TALGO ALTA VELOCIDAD SERIE 130